El vacío suave es un método de envasado especialmente cuidadoso, ideal para alimentos delicados como el queso. A diferencia del vacío clásico, el vacío suave genera una presión negativa reducida que protege el producto y garantiza al mismo tiempo un sellado hermético. Este método es especialmente importante en la industria quesera, ya que permite realizar una maduración controlada en el envase.

Con una máquina de cinta de vacío de SUPERVAC, este proceso se puede llevar a cabo de forma totalmente automática y con gran eficiencia. La máquina guía el producto a través del proceso de envasado, durante el que la lámina de vacío se coloca ajustada al producto y a continuación se sella de forma segura. El control preciso del vacío garantiza que los delicados quesos no se deformen ni se dañen.

Una ventaja fundamental de esta técnica es la posibilidad de dejar madurar el queso en el envase de forma controlada. La lámina hermética crea unas condiciones microbiológicas ideales, ya que favorece el crecimiento de determinadas bacterias y cultivos de maduración. De este modo, el sabor se desarrolla plenamente y de forma uniforme, higiénica y protegida de influencias externas como la humedad, el oxígeno o los olores extraños.

Además, la combinación de vacío suave, lámina de vacío y máquina de cinta SUPERVAC ofrece numerosas ventajas desde el punto de vista operativo:

  • Vida útil más larga sin aditivos ni conservantes
  • Minimización de la pérdida de peso durante la maduración
  • Calidad constante de un lote a otro
  • Envasado higiénico y seguro, ideal para la venta al por menor o al por mayor
  • Eficiencia y automatización en el proceso de envasado: ideal para queserías medianas e industriales

SUPERVAC es sinónimo de calidad, precisión e innovación en el ámbito del envasado al vacío. Las máquinas de cinta, robustas y de bajo mantenimiento, se pueden integrar con flexibilidad en líneas de producción ya existentes y adaptarse específicamente al tamaño y la forma de cada producto.